Opinión

15.Dic.2020 / 02:56 pm / Haga un comentario

Pueblo de Nueva Esparta, aunque ustedes no lo crean, el mismo sujeto que apoyó la intervención de tropas extranjeras en nuestro país, que promovió guarimbas en Nueva Esparta, que se retrató varias veces con el payaso y ladrón que defendía “el cese de la usurpación” y que además estuvo irresponsablemente involucrado en los primeros contagios por Covid-19 de nuestro estado, saboteando luego la labor de salvar vidas de los trabajadores de la salud, acaba de volverse loco o campeón de los cínicos. Presten mucha atención a lo que dijo «Alfredito» Díaz:

“Hermanos neoespartanos, 2021 será el año del resurgimiento de la oposición democrática. Nunca más dejaré de votar y, con todas las fuerzas a mi alcance, seguiré defendiendo la vigencia de nuestra Constitución. Adelante! Somos Nueva Esparta!”

Este señor está completamente desquiciado. Sin criticar nunca a su jefe Guaidó que llamó por toda Venezuela a no votar, participó calladito en las recientes elecciones, obligando a trabajadores de la gobernación a votar bajo la amenaza de despedirlos si no lo hacían. Tenemos las pruebas. La confirmación de que esto ocurrió está en el diputado que lograron elegir. De lo contrario no hubiesen sacado ni uno.

Usted que hace parte de este estado de hombres y mujeres con dignidad, ¿sería capaz de confiarle la defensa de sus derechos e intereses a alguien que se está revelando peor que un loco?

Este señor sin escrúpulos, capaz de aparecerse ahora diciendo todo lo contrario de lo que venía defendiendo, es lo peor de lo peor que hemos visto en el campo de la política insular. Una mezcla de bipolaridad e irresponsabilidad, llevada adelante vaya a saber con qué egoístas y oscuras intenciones. La negación de la decencia mínima que debe tener cualquiera que pretenda ocupar un cargo de responsabilidad política.

Todos en Nueva Esparta, chavistas, independientes y opositores, debemos repudiar esta manipulación malsana que niega la más elemental decencia que debe regir la relación entre las personas públicas y la sociedad. Eso no es política, es comportamiento mafioso.

La Paz de la familia venezolana que tanto ha sufrido por la violencia, exige castigo a los culpables del terrorismo y de la muerte de varios de nuestros compatriotas. Es inaceptable que alguien le quite la vida a otra persona por diferencias políticas. Eso es de bárbaros. Tampoco podemos admitir que haya venezolanos que atenten contra su propio país como si fueran extranjeros. Por eso exigimos castigo a los responsables del bloqueo y del robo de nuestro oro y de activos de la Patria como es el caso de la empresa venezolana Citgo.

El 2021 debe traernos justicia. Vamos Nueva Esparta!

Kendy Graterol, Legislador

 

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